Introducción

Como padres, uno de nuestros deseos más profundos es ver a nuestras hijas crecer sanas, felices y exitosas. La oración es una herramienta poderosa que nos permite depositar nuestras preocupaciones, esperanzas y sueños para ellas en manos de Dios.

Oración Corta

Señor, bendice a mi hija con tu amor y sabiduría. Guárdala, fortalécela y llénala de alegría y paz cada día. Amén.

Oración Larga

Padre celestial, acudo a Ti con un corazón lleno de amor por mi hija. Te pido que la envuelvas en tu amor y protección. “Guarda a mi hija en todos sus caminos; en tus manos encomiendo su espíritu” (Salmo 91:11). Que tus ángeles la guarden en todos sus pasos y decisiones.

“Enséñale el camino en que debe andar, y cuando sea mayor, no se apartará de él” (Proverbios 22:6). Implanta en su corazón tus valores y principios. Que crezca en sabiduría, estatura y gracia ante Ti y ante los hombres. Provéele fortaleza para enfrentar los desafíos y sensibilidad para apreciar las bendiciones de cada día.

Ilumina su camino con tu luz, guíala en sus decisiones y ayúdala a desarrollar sus talentos y habilidades para tu gloria. Que encuentre en Ti su refugio y fortaleza, y que su vida sea un reflejo de tu amor y bondad.

Te doy gracias por el regalo que es mi hija, y confío en tu cuidado y dirección sobre su vida. En el nombre de Jesús, Amén.

Devocional

Criar una hija es un viaje lleno de desafíos y alegrías. La oración no solo es un acto de petición, sino también un medio para fortalecer la conexión entre padres e hijas. A través de la oración, podemos pedir sabiduría para guiarlas y discernimiento para entender sus necesidades y deseos. La oración nos ayuda a entregar nuestras preocupaciones a Dios, confiando en Su plan perfecto para sus vidas.

Al orar por nuestras hijas, también les enseñamos el valor de la fe y la dependencia de Dios. Es una forma de mostrarles que, sin importar lo que enfrenten en la vida, siempre pueden acudir a Dios en busca de guía, consuelo y apoyo.

Conclusión

Orar por nuestras hijas es una de las expresiones más puras de amor. A través de la oración, las cubrimos con bendiciones y las preparamos para enfrentar el mundo con fe, confianza y amor. La oración es un legado de fe que les brindará fortaleza y guía a lo largo de sus vidas.